Se trata de un momento clave en la vida de todo deportista que ha trabajo dura durante meses para enfrentarse a este momento con ilusión porque llevaba esperándolo durante meses y con miedo por temor a fracasar y no cumplir sus expectativas. Medallas, records del mundo, records olímpicos, records nacionales, anécdotas, rankings, estadísticas,…. Lo inundan todo sin darnos un respiro. Pues nos guste o no el deporte podemos extraer unas lecciones que podemos aplicar en nuestra vida o nuestro trabajo.
- El éxito va a depender de nosotros mismos.
Los grandes deportistas no siempre triunfan en las olimpiadas. Está claro que hay estrellas del firmamento deportivo que siempre están a la altura y nunca fallan. Pero hay otros que en sus equipos y competiciones habituales siempre son el número uno y llegan a las olimpiadas y fracasan.
Esto nos dice que siempre puede haber una oportunidad para todos. Los que están normalmente en primera línea pueden cometer un error y debemos aprovechar la ocasión para ganar pequeñas batallas.
- Detrás de cada medalla hay una historia de trabajo y dedicación.
Un buen entrenador y un plan de trabajo adecuados son las herramientas del que quiera llegar lejos en esta competición. Estar en el podio o no dependerá en gran parte del trabajo previo realizado durante meses.
Toma nota porque para triunfar será necesario planificación, esfuerzo y contar los mejores.
- Aprender de los errores.
Cada celebración delos juegos olímpicos se sigue con detalle desde la ciudad que albergará las siguientes olimpiadas. Los éxitos y fracasos de la antecesora será un curso acelerado para la siguiente anfitriona de los juegos sobre lo que sí hacer o no cuando esta coja el testigo.
Pues eso, siempre ojos bien abiertos, la competencia, clientes, proveedores, compañeros de trabajo, otros candidatos si estamos en proceso de selección, nos pueden dar la llave de nuestro éxito gracias a aprender de sus errores.
- Nunca rendirse.
Habremos visto como en muchas ocasiones los deportistas compiten en varias disciplinas. El que las cosas no les vayan bien en su primera competición no debe afectarles de cara a las siguientes. Es importante mantener la cabeza fría y no venirse abajo.
Siempre hay una oportunidad, mantenerse firme en nuestros objetivos y trabajar incansables nos pondrá más cerca de nuestra meta y nos mantendrá preparados para cuando llegue el momento.
Como ves, los juegos olímpicos son una oportunidad para entrenar nuestra mente y potenciar nuestra motivación ante los retos que nos hayamos planteado.
Experimenta el deporte desde otro punto de vista.