Lo primero será analizar qué se está vendiendo, dónde y cómo se está haciendo. Ello nos permitirá elegir el mercado, productos o servicios y la estrategia a seguir.
Empezar a vender en el ámbito del comercio electrónico internacional
Podemos comenzar echando un vistazo a informes de mercado que podemos encontrar en la página web del ICEX sobre comercio electrónico en diferentes países o de empresas como We are social, en la que se analiza el comercio electrónico a nivel global en su conjunto. También podemos entrar en plataformas como Amazon o Ali Express en distintos países para comprobar cuales son las ventas más populares.
Una vez que tengamos una primera idea o contacto con el comercio internacional on-line deberemos enfocar nuestro análisis en pocos países y de ahí elegiremos uno o dos para comenzar. Generalmente aquellos países con un mayor desarrollo tecnológico y riqueza por habitante suelen ser los que más compran por internet tales como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, países de la Unión Europea, Japón y Corea, aunque es cierto que ese mapa va a cambiar rápidamente por la incorporación de otros países con población más joven que prefiere este canal frente a otros.
En cualquier caso, antes de seleccionarlos, tenemos que investigar igualmente su legislación referida a la compra on-line y las obligaciones que aplican al vendedor, como por ejemplo el etiquetado en el idioma del país, la garantía del producto, normas de seguridad, etc.
Si no tenemos claro que producto o servicio vender, puede ser útil comenzar valorando aquellos que conozcamos bien a través de nuestra experiencia profesional o bien por nuestras aficiones y gustos, o también podemos considerar comercializar aquellos productos que despiertan un mayor interés entre las personas de un país. Para conocer estos últimos existe un recurso gratis de Google llamado Google Trends que te permite ver los términos más buscados en internet a través de Google en diferentes países. En cualquier caso, una vez que tomemos la decisión deberemos estudiar más a fondo la venta de los productos elegidos en los países seleccionados.
Plataformas disponibles para comercio electrónico internacional
Lo siguiente es determinar si venderemos a través de una plataforma de comercio electrónico como Ali Express o Amazon o bien utilizamos nuestra propia tienda on-line. Ambas opciones tienen sus pros y sus contras. Así, por ejemplo, vender a través de Amazon te da un tráfico de potenciales clientes que no vas a tener, al menos al principio con tu web y te va a permitir usar sus sistemas de entrega (logística) y pagos. Pero vendiendo en esa web nos encontraremos múltiples competidores y conseguir diferenciación de nuestra oferta puede ser todo un reto.
Además, no hay que olvidar que el cliente no es tuyo, sino de Amazon, y así las opciones de promocionar nuestra marca y cartera de productos estarán limitadas a lo que establece el portal. Por otra parte, vender a través de la página web propia resultará más difícil, al menos al principio, aunque elegir esta opción permite una mayor interacción con los clientes y fidelización a la marca, así como poder adaptar las estrategias a tus recursos y objetivos en cada momento.
Aunque es necesario comentar que hay empresas que venden sus productos tanto a través de Amazon como de su propia página web, y también hay casos en los que los vendedores de los productos de una empresa en Amazon no son los fabricantes sino importadores o distribuidores de la marca en otro país.
Entorno económico de la actividad de comercio electrónico internacional
Bien, tenemos el país y el producto o productos y nuestro punto de venta ¿Qué debemos hacer después? Números: Diseñar un plan económico financiero, al menos de carácter anual, que permita al menos hacer rentable un proyecto de venta on-line internacional. Para ello deberemos tener en cuenta las inversiones a realizar, los gastos, el precio de los productos o servicios ofertados así como los ingresos por cada venta producida y el número de productos a vender para al menos equilibrar gastos e inversiones. Igualmente deberemos tener en cuenta los impuestos aplicables en el país del comprador y en el nuestro.
Posteriormente deberemos crear una estrategia para llegar a nuestro potencial cliente en otro país. Para ello el marketing digital ofrece diferentes opciones: SEO, SEM Social Selling, marketing de contenidos, etc. Conviene no descartar ninguna y planificar las acciones a llevar a cabo en un plan de marketing digital y adaptar a la situación del proyecto en cada momento y a la estética y costumbres del país o países donde la desarrollemos. Conviene realizar un seguimiento permanente de ese plan, analizando la eficacia de cada acción realizada.
Además de estudiar e investigar por internet la actualidad del comercio electrónico internacional, es recomendable formarse para gestionar con garantía tanto la preparación como el desarrollo de este proyecto y por ello te recomiendo este curso: Negocios online y comercio electrónico.
Y como no, además de estas recomendaciones, te deseo suerte y ánimo en tu empresa.
