1- Rompe la barrera del miedo y lánzate a la acción.
Desarrolla tu idea pero no te eternices en crear el mejor business plan del mundo. Hacerlo no te va a asegurar el éxito.
Una vez pongas negro sobre blanco las bases sobre la que vas a construir tu negocio, céntrate en desarrollarlo. Empezar es difícil pero no lo demores más del tiempo necesario.
2- Busca a los mejores inversores:
Uno de los errores más frecuentes es que cuando queremos emprender tendemos a pensar únicamente en inversores dispuestos a apoyar nuestra idea con una buena cantidad de dinero.
Si lo consigues perfecto, pero todos sabemos que la probabilidad que esto suceda es más bien...escasa. Dale al coco y busca inversores que aporten algo más, hagan crecer tu negocio y te abran puertas en tu sector.
3- No te dejes seducir por los cantos de sirena ni del entusiasmo de "los tuyos":
Todos necesitamos y buscamos apoyo en quienes tenemos más cerca: familia, amigos... Pero ve más allá y busca las opiniones de otras personas con las que no tengas ese trato de confianza. Escucha las críticas constructivas y sé humilde para reconocer errores, corregirlos y revertir la situación en algo positivo para tu proyecto.
4- Acepta que no puedes hacerlo todo tú solo:
Dale confianza a tu equipo desde el primer momento y aprender a delegar y preocúpate por ser un líder y no un jefe. Probablemente podrás contar con los dedos de una mano los integrantes de tu equipo cuando pongas en marcha tu empresa, e incluso te sobren, así que no puedes permitirte jugar el papel de jefe a la antigua usanza.
Eres parte del equipo, trasládales la pasión por tu negocio y la enorme fuerza de trabajo que estás dispuesto a ejercer. Da el callo como el que más y conseguirás que tu equipo te vea como un líder.
5- Piensa como lo harían tus clientes:
Métete en la cabeza de tu primer cliente, pregúntate porqué va a querer comprar tu producto, preocúpate por saber qué hace, cómo se comporta, cómo piensa y buscas todas las herramientas a tu alcance para acceder a él. Acércate a tu cliente tanto como puedas y esfuérzate por ofrecerles un valor añadido.
6- No eres una isla en medio del océano:
Estudia e investiga a la competencia de tu sector desde el primer momento y pregúntate qué te diferencia de ellos. Los peces grandes son muy atractivos pero recuerda que puedes aprender mucho de competidores más pequeños.
7- Apuesta siempre por el talento:
El factor humano es fundamental para el éxito de tu proyecto. No busques únicamente conocimiento en los candidatos a formar parte de tu "dream team", asegúrate también de encajar personalmente y de sumar perfiles flexibles capaces de adaptarse a los cambios con rapidez.
8- Planificación y foco, es justo y necesario:
Necesitas una hoja de ruta que te sirva de guía y organiza todos los recursos de los que dispones. Pon el foco en el core de tu negocio, es decir, aquellas actividades esenciales que definen lo que eres y generan valor para tus clientes.
9- Pregunta, pregunta y pregunta:
Tenemos increíbles herramientas para llegar de una forma sencilla y rápida a los mejores expertos de cualquier sector. Atrévete a contactar con ellos y lanzarles una pregunta. Cree en ti mismo y sé vehemente. Te sorprenderá lo fácil que puede ser llegar a estos "gurús".
10- Tu web, tu mejor carta de presentación:
Dispones de gestores de contenidos como Wordpress sobre la que puedes crear tu web de empresa tu solito. Piensa en tu imagen, en tu logo, en ser disruptivo, en aportar valor y diferenciarte desde el primer momento desde todas las vías posibles. Preocúpate por brindar una experiencia de usuario positiva y única. Tu estrategia digital será vital para alcanzar tus objetivos.
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