Por otro lado, durante la búsqueda de empleo en un escenario de paro estructural, la negociación salarial sigue siendo relevante. Aunque el mercado laboral puede estar más competitivo, es fundamental reconocer nuestras capacidades y el valor que podemos aportar a la empresa. Saber negociar adecuadamente puede permitirnos obtener una mejor remuneración, incluso en tiempos de incertidumbre económica, o acceder a beneficios adicionales que compensen la oferta salarial inicial.
Asimismo, en el contexto de nuestro primer empleo, aunque no tengamos una experiencia extensa, es importante negociar desde una postura informada, basada en la investigación del mercado laboral y las oportunidades de crecimiento dentro de la empresa.
Cómo abordar el proceso para negociar el salario
1. Investiga el salario medio para ese puesto, con tu nivel de experiencia y en tu área geográfica
Uno de los primeros pasos fundamentales a la hora de negociar tu salario es investigar el salario medio para el puesto que deseas, considerando tu nivel de experiencia y la ubicación geográfica en la que trabajas.
Conocer estas cifras te proporciona una base sólida para la negociación, ya que te permite hablar desde una posición informada y ajustar tus expectativas de manera realista.
Para empezar, puedes utilizar herramientas como Glassdoor, Indeed o LinkedIn Salary, que permiten comparar salarios para tu puesto en función de la ubicación y experiencia.
Es importante tener en cuenta que los salarios varían según la región, debido a factores como el coste de vida o la demanda en el mercado laboral local. Por ejemplo, un diseñador gráfico en Madrid podría tener un salario diferente al de una persona en la misma posición en una ciudad más pequeña.
Además, considera tu nivel de experiencia: un profesional con cinco años de trayectoria puede esperar un salario más alto que alguien que está iniciando su carrera.
La clave es usar esta investigación para establecer un rango salarial razonable, que puedas presentar en la negociación, demostrando que estás bien informado sobre lo que el mercado paga y que puedes respaldar tu solicitud con datos concretos. Esto genera una percepción positiva y profesional ante el empleador.
2. Defiende tus logros y aportaciones a la empresa
Para negociar de manera efectiva tu salario, es esencial defender tus logros y aportaciones concretas a la empresa.
Esto te permitirá ser más convincente, ya que estarás respaldando tu petición con resultados tangibles que demuestran tu valor para la organización. Cuando se trata de destacar tus logros, es crucial ser específico y cuantificar tus resultados siempre que sea posible.
Por ejemplo, en lugar de decir simplemente "he mejorado las ventas", puedes decir algo como: "Aumenté las ventas en un 25% durante el último trimestre", o "Implementé una estrategia de marketing digital que atrajo a 300 nuevos clientes en un periodo de tres meses".
Este tipo de resultados concretos no solo muestran tus habilidades y contribuciones, sino que también permiten al empleador visualizar el impacto directo que has tenido en el crecimiento o éxito de la empresa.
Al defender tus logros con ejemplos medibles, tu argumento se vuelve más sólido, ya que estás demostrando tu valor con hechos y no solo con opiniones. Además, esta estrategia te posiciona como un empleado proactivo y centrado en los resultados, lo cual es crucial en una negociación salarial.
3. Acota un rango salarial razonable y mantente firme
Cuando estés negociando tu salario, es fundamental acotar un rango salarial razonable y mantenerte firme dentro de esos límites. Definir un rango te permite ser flexible, pero al mismo tiempo te asegura que estás abriendo una discusión en torno a un salario que consideras justo.
Investiga bien las cifras, considerando el puesto, tu experiencia, y la región, para establecer un rango que se ajuste tanto a tus expectativas como a la realidad del mercado.
Sin embargo, es importante evitar pedir cifras que se salgan de lo razonable, ya que pedir un salario excesivamente alto sin justificación puede ser visto como una falta de realismo y podría llevar a que seas descartado del proceso.
Mantén el rango dentro de los márgenes realistas, asegurándote de que se basa en tus habilidades, logros y la información de mercado que has investigado previamente.
Al mismo tiempo, asegúrate de mantenerte firme en el rango que has definido, demostrando seguridad en tu valor, pero sin dejar de ser razonable. Esto generará una impresión profesional y de seriedad ante el empleador, aumentando tus posibilidades de llegar a un acuerdo satisfactorio.
4. Ensaya tu discurso con alguien de confianza
Para preparar una negociación salarial con confianza y eficacia, es fundamental ensayar tu discurso con alguien de confianza. Este ensayo te ayudará a ganar seguridad, identificar puntos débiles en tu presentación y familiarizarte con el flujo de la conversación.
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Elige a alguien de confianza: Puede ser un amigo, familiar o colega que entienda la importancia de una negociación salarial. Lo ideal es que esta persona sea capaz de ofrecerte feedback honesto y constructivo, y te ayude a identificar áreas de mejora.
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Simula la situación real: Durante el ensayo, recrea la negociación de manera lo más realista posible. Pide a la persona que te haga preguntas difíciles o inesperadas que podrías enfrentar, como "¿Por qué crees que mereces ese salario?" o "¿Qué valor añadido aportas a la empresa?". Esto te ayudará a practicar respuestas concisas y claras sin improvisar.
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Refina tu discurso: A medida que ensayas, toma notas sobre cómo te sientes, si te expresas con claridad y confianza, y si logras defender tus logros de manera convincente. La persona con la que practicas puede darte comentarios útiles sobre tu lenguaje corporal, tono de voz y la estructura de tu discurso.
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Practica varias veces: La repetición es clave. Ensaya varias veces hasta que te sientas cómodo con tu discurso. De esta manera, cuando llegue el momento de la negociación real, no sentirás que estás improvisando, y podrás comunicarte de manera más fluida y segura.
Este enfoque te ayudará a estar mejor preparado, reducir los nervios y transmitir confianza, lo cual es fundamental para tener éxito en la negociación salarial.
5. Elige un momento conveniente
A la hora de negociar tu salario, seguir estos pasos puede marcar la diferencia entre obtener la compensación justa que mereces o perder oportunidades, vamos a resumir los puntos anteriores:
Primero, es crucial investigar el salario medio para tu puesto, teniendo en cuenta tu experiencia y ubicación geográfica, lo que te ayudará a tener una base realista en la negociación. Luego, defender tus logros concretos con ejemplos medibles refuerza tu petición, demostrando el valor que has aportado a la empresa. Establecer un rango salarial razonable y mantenerte firme, sin pedir cantidades desproporcionadas, te permitirá negociar con confianza. Además, es esencial ensayar tu discurso con alguien de confianza, para pulir tu comunicación y prepararte para preguntas difíciles. Finalmente, elegir el momento adecuado, como tras un proyecto importante o durante las evaluaciones de desempeño, te dará una ventaja, ya que tus logros estarán frescos en la mente de tu jefe.
Formarse no solo es importante en habilidades técnicas o específicas del trabajo, sino también en áreas como los derechos laborales, contratos, seguridad social o recursos humanos.
Un profesional bien formado debe conocer estas áreas para poder defender mejor sus intereses en el entorno laboral y asegurarse de que su carrera esté alineada con las normativas vigentes. Una correcta orientación laboral y formación continua son claves para crecer tanto personal como profesionalmente, y negociar adecuadamente el salario es solo una parte del desarrollo integral de un buen profesional.
