Mejora el aprendizaje con el deporte

"Orandum est ut sit mens sana in corpore sano’  (Debemos orar por una mente sana en un cuerpo sano)

Hay que llegar al siglo XIX para ver cómo esta expresión se empezó a generalizar y tomó el significado con el que la conocemos ahora. Su uso se extendió para dar a conocer la gimnasia moderna de la época dejando atrás la vinculación religiosa de la misma.

Esta relación de mente y cuerpo sanos sigue más vigente que nunca. Se necesitan el uno al otro y deben vivir en una simbiosis perfecta, una interacción biológica y vital que nos permita alcanzar el equilibrio y, por qué no, la felicidad que tanto ansiamos.

En todo esto el ejercicio juega un papel fundamental ya que nos aporta tanto física como mentalmente todo lo que necesitamos para mantenernos sano, productivos en el trabajo y vitales en todas las facetas de nuestra vida, incluso para mejorar nuestro aprendizaje es de gran ayuda la actividad físicia.

Repasemos en primer lugar lo que es más obvio, el impacto que la actividad física tiene en nuestro cuerpo.

Beneficios del ejercicio físico para nuestro cuerpo:

1. Fortalece nuestros músculos
2. Mejora nuestra postura corporal
3. Mantiene nuestro peso a raya
4. Nos aporta mayor flexibilidad y agilidad

Pero si es fácil de entender que la actividad física pone en marcha nuestro metabolismo y mejora nuestro estado de forma; tanto o más importantes son los mecanismos que se desarrollan y que impactan en nuestro de ánimo o en nuestras capacidades.

Expertos en medicina como el eminente doctor y profesor de psiquiatría de la Universidad de Harvard JOHN J. RATEY han dedicado su carrera a demostrar que el ejercicio físico ayuda al aprendizaje Hipervínculo http://johnratey.typepad.com/

"No es exagerado decir que el ejercicio regular mejora las funciones fisiológicas y el desempeño cerebral. En realidad, una medicina maravillosa” John Ratey.

Beneficios del ejercicio físico para nuestra mente:

1. Aumenta nuestra capacidad de concentración
2. Ayuda al aprendizaje
3. Minimiza los niveles de estrés
4. Incrementa nuestra motivación
5. Estamos de mejor humor
6. Mejora nuestras relaciones interpersonales

Y todo esto ¿Por qué? ¿Quiénes son las responsables de todas estas bondades del ejercicio físico?

Cuando nos ponemos en marcha, nuestro cuerpo comienza a generar una serie de hormonas que son las encargadas de proporcionarnos tanta energía, felicidad y buena memoria. Las 4 principales son:

• Serotonina: influye en nuestro estado de ánimo y se libera al realizar ejercicio físico fundamentalmente aire libre. Proporciona una sensación de calma que nos ayuda a alejar la depresión y mejorar el sueño. Además favorece a regular nuestra alimentación evitando una ingesta superior a la necesaria
• Dopamina: esta hormona nos permite experimentar placer tras una sesión de actividad física. Es la que nos provoca que queramos repetir y nos “engancha” al ejercicio continuado.
• Endorfinas: son las más conocidas entre el público en general y nos hacen sentir felicidad y alegría. Son además un analgésico natural, que reduce el sentimiento de dolor así como la ansiedad y el estrés.
• Norepinefrina: estamos ante un mensajero químico del cerebro cuya función se centra en la modulación del aprendizaje y la memoria

 ¿Por dónde empezar sin que te cueste?

Ahora que sabes los beneficios y quiénes se encargan de esto, te estarás preguntando cómo consigues tú, que esa tarea pendiente, siempre en el top 5 de los buenos propósitos de año nuevo, cumpleaños, cambio de estación, etc., pasa a ser una realidad.

Aquí tienes 5 consejos infalibles para que no te lo pienses y arranques ya:

 Escoge una actividad que te guste. Para motivarte es fundamental que lo que vayas a hacer te divierta y se trate de una actividad que de entrada encaje con lo que te gusta.

1. Mejor con amigos. Seguro que puedes convencer a alguien para que te acompañe y aprovechar para compartir ese rato de ejercicio con un amigo/a. te ayudará a no faltar a la cita, por amor propio o sólo porque es una excusa para ver más a tus amigos.
2. Conviértelo en rutina. Realizar esta actividad los mismos días y en el mismo horario es recomendable para que lo conviertas en algo estable. Asegúrate de escoger bien en ti agenda y que los días que te propongas son los que realmente tienes más tiempo libre de forma habitual.
3. Acompáñalo con una alimentación saludable. La alimentación es otro factor relevante para que cuerpo y mente se mantengan despiertos y en forma, algo que es esencial también en todo proceso de aprendizaje.
4. No tires la toalla. Por último, y como máxima para casi todo en la vida, no abandones a las primeras de cambio, analiza qué es lo que está fallando y ponle remedio. Inténtalo y seguro que encuentras la manera, lo que está en juego merece la pena.

¿Eres de los que ya hace ejercicio y disfrutas sus beneficios? ¿Algún consejo para los neófitos? Si todavía no eres del club de los cuerpos activos, pon en práctica estos consejos y disfruta de los beneficios.