Los obstáculos del ecommerce
Miedo a compartir datos personales.
Los consumidores están muy reticentes a compartir sus datos personales con los comerciantes pues, para realizar un registro, cada vez es mayor la información que se requiere. La obligación de compartir su dirección, su teléfono o incluso los datos de su documento nacional de identidad se ha convertido en un factor de rechazo del ecommerce para muchos consumidores. La desconfianza que gira en torno a ofrecer datos personales se acentúa en el terreno económico y es que, según los datos del INE, para que los consumidores se lancen a la compra en el ecommerce, las pasarelas de pago deben ser diversas. A los consumidores del ecommerce les gusta poder decidir cuál será el canal de pago que van a emplear, atendiendo a cuál les merece más confianza. Los más empleados son: la tarjeta de crédito, el servicio de Paypal, el pago contra reembolso y la transferencia bancaria.
Rechazo a los gastos de envío.
Entras en un ecommerce. Haces un recorrido por todos los productos disponibles, evalúas aquellos que te interesan y los introduces en el carrito de compra. Cuando vas a pagar te das cuenta de que el importe ha cambiado, viéndose ahora incrementado por los gastos de envío. ¿Cuál crees que es la reacción de más de la mitad de los compradores? Efectivamente, abandonar la compra.
Los gastos de envío son, en muchas ocasiones, causantes de que un posible comprador no realice su compra online. Esto es debido a que al consumidor no le gusta ver incrementado el precio de su pedido por algo tan intangible por lo que los expertos recomiendan que los productos ya cuenten con ese gasto en su precio inicial.
Problemas con el reparto.
Si eres asiduo a las compras online, seguro que no te parece raro que éste sea uno de los mayores hándicaps del ecommerce. Y es que, desde que recibes el aviso de entrega hasta que ésta se formaliza pueden pasar un millón de cosas que pasan por tenerte esperando en casa durante horas para que finalmente resultes, sin saber muy bien cómo, “ausente”. Ofrecer un punto de recogida o mayores facilidades de entrega sería la forma de evitar esta problemática.
Devoluciones complicadas.
En ocasiones, las políticas de devoluciones son tan estrictas y requieren tanto esfuerzo que hacen que la satisfacción de los consumidores desaparezca por completo y el resultado de esta experiencia suele ser la negativa a una nueva compra. Es el caso de aquellos ecommerce que no permiten devolver de forma gratuita, que exigen que se conserve el embalaje original o que no disponen de un punto de recogida física. Eliminar esta frontera es muy sencillo y los beneficios para las empresas son enormes.
Ecommerce poco atractivas.
En muchas ocasiones, la barrera viene dada por una web poco atractiva o de difícil navegación. Si resulta complicado encontrar el producto que se está buscando o las imágenes del mismo no lo muestran de forma clara, lo más probable es que el ecommerce fracase. Si bien tener una web navegable es indispensable para el posicionamiento SEO, cuanto más necesaria resulta para que los usuarios tengan una experiencia positiva.
Escasa adaptabilidad a los nuevos dispositivos móviles.
Puede parecer mentira a estas alturas, sin embargo, son muchos los comercios electrónicos que no están adaptados a los teléfonos móviles. Atendiendo al hecho de que la mayor parte de los consumidores de internet emplean su dispositivo móvil para acceder a las webs, parece obvia la necesidad inmediata de adaptar los ecommerce a todos los dispositivos.
Desconfianza sobre el producto.
El miedo a recibir un producto completamente diferente al adquirido supone otra de las barreras del ecommerce y es una de las razones por las que muchos consumidores prefieren comprar de forma física. Para evitar que esto suceda, se debe ofrecer la máxima información posible del producto en cuestión, con fotos profesionales e incluso un apartado para que los propios compradores puedan subir sus fotos y opiniones. Eso generará confianza en el resto de los consumidores y favorecerá la compra online.
Esta desconfianza ha dado pie a dos fenómenos que sin las nuevas tecnologías no tendrían cabida: el showrooming, que consiste en realizar un reconocimiento físico del producto en tienda y su compra de forma online y el webrooming, que es justo lo contrario, el consumidor se informa a través de la red y adquiere el producto en tienda física.
Las claves para superar las barreras del ecommerce
Atendiendo a las barreras que los consumidores se encuentran a la hora de realizar una compra por internet, podemos extraer una serie de claves para evitar esos pequeños obstáculos. Algunas de ellas son:
- Simplificar los procesos de registro u ofrecer la opción de comprar sin registrarse.
- Disponer de todos los canales de pago posibles para que sea el consumidor el que elija el que mejor se adapta a sus posibilidades.
- Eliminar los costes de envío incluyendo estos en el coste total de los productos para que la suma final no se vea incrementada y el consumidor sepa el dinero que va a gastar desde el primer momento.
- Trabajar con empresas de reparto profesionales y disponer de puntos de recogida en las ciudades.
- Tener una política de devoluciones clara y sencilla.
- Ofrecer una página web actualizada, ordenada, con imágenes de calidad y con un buscador.
- Adaptar el ecommerce a los dispositivos móviles, incluida la pasarela de pago.
- Tener una App para el ecommerce.
- Ofrecer la posibilidad de guardar el carro de la compra para el futuro.
Para conocer más en profundidad las características que debe tener tu comercio electrónico, te recomendamos que leas la Guía de administración de un ecommerce y te conviertas en todo un experto. También puedes dar un paso más allá y realizar un curso para aprender a implementar tu tienda online de forma sencilla, existen diversas plataformas que te permitirán trasladar tu negocio al universo digital. Complementa tu formación con nuestro completo curso de ecommerce y tu negocio será un auténtico éxito.
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