Lo primero es no dejar que la situación te afecte demasiado y tampoco empezar directamente a buscar como un loco, lo mejor es tomárselo con calma, poco a poco ver otras opciones e inscribirse en el paro. Si eres menor de 30 años y cumples los requisitos lo más probable es que te recomienden inscribirte a garantía juvenil, que aporta un montón de ventajas para encontrar empleo.
Si tu situación económica te lo permite y quieres encontrar un trabajo en algo especifico, que te guste y de lo que no te has formado puedes realizar diversos cursos con los cuales puedes obtener un certificado de profesionalidad que te ayude a buscar empleo.
Si no es el caso y tu intención es empezar a buscar otro empleo debes hacerlo con cabeza, no aceptar el primer empleo que veas sin enterarte bien sus condiciones ya que a la larga puedes arrepentirte. No te olvides actualizar tu curriculum con la experiencia y las habilidades que hayas obtenido en el anterior para tener más posibilidades de encontrar otro. Si realizas una formación también debes ponerlo ahí.
Con todo esto añadido ya a tu curriculum puedes empezar a buscar trabajo. Hay varias formas de hacerlo, puedes ir preguntando en los sitios donde te interese trabajar o puedes buscar online. Hay varias páginas de búsqueda de empleo como infojobs o Linkedin donde registrándote puedes buscar entre miles de ofertas ajustándolas a tu zona y temas de interés. Debes tener paciencia ya que por cada oferta suele haber miles de peticiones y desanimarte por que no te acepten en un trabajo sería un error.
Tampoco olvides hablar con tus familiares y amigos que puedan ayudarte a encontrar empleo ya que una de las mejores formas de buscar empleo es con contactos, ya que eso evita la selección.
Si lo haces bien y acabas consiguiendo una entrevista aprovéchalo, aquí te damos 5 consejos para destacar en una entrevista de trabajo.