La comunicación en el contexto actual
Estudiaste periodismo en la Universidad de Santiago de Compostela y, actualmente, eres consultora de comunicación y marketing. ¿Tu interés por la comunicación corporativa surgió mientras te formabas o lo descubriste más adelante?
Como muchos compañeros, llegué a la Facultad de Periodismo con una visión idealizada del Periodismo. Luego descubres que no todos los periodistas son corresponsales de guerra, o críticos de cine, y que hay vida más allá de los medios. A lo largo de mi trayectoria he podido conocer los medios desde dentro, pero la comunicación es un campo muy amplio y variado, y los periodistas tenemos mucho que aportar también desde el lado de la empresa. Haber desarrollado ambas facetas aporta un conocimiento muy valioso para brindárselo a nuestros actuales clientes, la vida te va colocando en el lugar donde tienes que estar.
En 2015 decidiste crear tu propia consultoría de comunicación. ¿Qué te llevó a tomar esta decisión? Y, ¿Qué hacéis en MISUQUI?
Siempre he valorado la libertad de pensamiento, de decisión, y de actuación, pero eso sólo te lo puedes permitir cuando tienes el bagaje suficiente para saber lo que quieres. Cuando tienes tu propio negocio eres libre para decidir con qué proyectos te identificas, con quién quieres trabajar y cómo lo quieres hacer. Para mí, ese ha sido nuestro éxito, creer en los proyectos que han puesto en nuestras manos.
En Misuqui trabajamos con empresas públicas y privadas, profesionales y entidades de diversa índole, ayudándoles a comunicar de forma efectiva con una estrategia personalizada que fortalezca la relación con su público objetivo y su posicionamiento en el mercado.
En algunas ocasiones en el sector podemos encontrarnos que la estrategia de comunicación todavía tiene poca consideración dentro de ciertas empresas ¿crees que es cada vez menos frecuente? ¿la comunicación ocupa una buena posición o todavía queda camino que recorrer?
La comunicación sigue siendo un pilar fundamental de cualquier plan de negocio. La comunicación es todo lo que haces en tu empresa, desde cómo coges el teléfono, hasta la relación con tus empleados, con los medios de comunicación, con tus ‘stakeholders’ o el rótulo que tienes en la puerta. Todo comunica, y tu imagen, reputación, visibilidad y credibilidad te ayudarán, en un alto porcentaje, a sostener tu negocio.
Creo que los órganos de decisión de las empresas saben esto, y muchas ya han integrado a los directores de comunicación de forma natural en su estructura, pero poner en valor la Comunicación como una fortaleza que repercute en tus cifras de negocio sigue siendo un campo de batalla en muchas otras organizaciones, y ahí está nuestra labor didáctica.
¿Cómo valoras el papel de las redes sociales como canal de comunicación para las empresas? ¿Es posible prescindir de ellas y tener éxito?
Las redes sociales son un escaparate magnífico para muchas empresas y profesionales. Hemos visto, sobre todo a partir de la pandemia de 2020, que los canales digitales son un instrumento indispensable en cualquier estrategia de comunicación global que se precie para llegar a donde no puedes físicamente. Pero, como todo, debe haber sentido común y coherencia en su empleo. Ni todas funcionan igual ni sirven para todos los negocios. Hay que analizar, conocer nuestro público, qué objetivos queremos alcanzar, y entonces decidir los canales adecuados, tanto en el ámbito online como en el offline.
Existen muchas empresas que funcionan sin dar prioridad a sus canales digitales, sobre todo en negocios consolidados, con un buen producto o servicio detrás, pero debemos tener una visión 360º y saber aprovechar las oportunidades que brindan para hacer crecer nuestro negocio. Eso sí, le sacaremos mayor rendimiento si lo delegamos en manos profesionales.
Talento y formación, de la mano para ser un buen comunicador
Se suele decir que la comunicación es un oficio y que se aprende trabajando, ¿qué consejo le darías a aquellas personas que quieren dedicarse a la comunicación?
La comunicación, en general, es un mundo apasionante, pero muy amplio y camaleónico. Explorar todas las opciones y probar en qué medio te encuentras más cómodo es un buen comienzo.
Leer mucho, escribir, acostumbrarnos a escuchar antes de hablar, desarrollar la paciencia y nunca dejar de tener curiosidad por aprender y seguir formándonos.
¿Qué aptitudes consideras que debe tener un buen comunicador?
Para hacernos entender con éxito debemos contar con capacidad de adaptación, de escucha activa, claridad de ideas, dominar el lenguaje escrito y oral, ser breves y concisos en nuestras exposiciones, modular la voz y los gestos, y un punto de creatividad y chispa…
¡Por supuesto que no todos tenemos todos esos talentos!, pero sí podemos hacernos fuertes en aquello que se nos da mejor, y practicar el resto con paciencia y tesón. En Misuqui contamos con un programa de formación específica para mejorar las habilidades de comunicación en público. Un buen comunicador no nace, se hace.
Leer mucho, escribir, acostumbrarnos a escuchar antes de hablar, desarrollar la paciencia y nunca dejar de tener curiosidad por aprender y seguir formándonos
En MISUQUI os definís como especialistas de la escritura, ¿se puede aprender a contar historias o es algo innato? ¿Todas las empresas tienen una narrativa?
Tanto en las históricas fábulas de Esopo, con su moraleja final, como en el actual Storytelling, la narración tiene una misma función, contar historias de las que podamos aprender algo para aplicar no sólo en la vida, sino también en los negocios.
Todas las empresas tenemos un inicio, experiencias, una evolución… Detrás de ellas se encuentran personas que han creído en sí mismas y han construido sus sueños, y por el camino le han pasado cosas…. Ahí está la magia, si rascas siempre encuentras algo que contar, aprender a hacerlo con un propósito es posible también.
¿Qué formación crees que es fundamental para trabajar en comunicación y marketing hoy en día?
En nuestra agencia, además de la formación oficial, valoramos las habilidades llamadas blandas: capacidad de adaptación, autonomía, saber trabajar en equipo, liderazgo, escucha activa y diálogo. Es fundamental generar puntos de encuentro donde compartir opiniones, noticias, preocupaciones, porque cuando te sientes valorado y arropado por un equipo, los obstáculos se superan, surgen las mejores ideas, y la empresa y las personas evolucionamos.
Después de casi 20 años de trayectoria en el sector, ¿cuál ha sido el mayor aprendizaje?
Como amante de las artes marciales, citaría a Bruce Lee para resumir a lo que debemos aspirar en una profesión como la nuestra: “Sé agua, amigo mío”.
Como el agua, podemos fluir y acariciar suavemente las rocas a su paso, o golpearlas con firmeza al caer desde lo alto de una cascada. La clave está en la flexibilidad, la tenacidad, adaptarnos a los cambios y ser pacientes. En resumen, podemos adoptar distintas formas, o variar nuestra ruta, pero nunca olvidarnos de quiénes somos ni a dónde nos dirigimos.
Y, por último, ¿dónde podemos seguirte?
Podéis seguir nuestro trabajo en www.misuqui.es y en las redes sociales: