Hay mucha diferencia entre “predicar al viento” y que “te escuchen”, entre programar actividades y que estas sean realizadas o simplemente entre pensar que vas a conectar con el alumnado, lograr motivarlo y ayudarle…o no conseguirlo. Sea una formación presencial u online el caso es que siempre nos encontramos pendientes de lograr que nuestra misión logre alcanzar los objetivos fijados.
Por ello, antes de iniciar cualquier nueva actividad, somos conscientes de que es clave disponer de nuestros mejores recursos, lo más a mano posible. En este artículo he intentado reunir todo aquello que nos puede ayudar en esa tarea a la hora de afrontar una tarea como formadores para lograr esas metas de mayor eficiencia, esa deseable profesionalidad, así como ofrecer algunas ideas que nos puedan ayudar a sacar “nuestra mejor versión” a la hora de afrontar una tarea formativa.
Formar de manera más eficiente y ser formador de Marca Propia.
De tanto repetir, a estas alturas, las palabras Branding o “Imagen de marca” han acabado formando parte de nuestro discurso diario. Pero, ¿se puede aplicar el concepto de “Marca Propia” o emplear el término "Marca Personal docente” en referencia a un formador? Considero que la respuesta es un sí rotundo.
Si hacemos siempre las tareas de la misma forma sabemos que alcanzaremos siempre los mismos resultados o como sentenció magníficamente Albert Einstein: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”. Eso sí, estaréis pensando que las marcas pueden ser buenas o malas, verdaderas, blancas…como profesionales nuestro único camino es el de lograr la mejora continua. La marca que siempre ambicionamos disfrutar. Pero lógicamente no desde un punto de vista comercial… o mercantilista (esperando que los alumnos nos adquieran) sino desde ese punto de magnetismo que toda buena marca logra transmitir.
No es preciso inventar la rueda, es posible incrementar nuestra formación sobre el trabajo en equipo, gestión de conflictos, inteligencia emocional, técnicas creativas, etc…y amoldar nuestra forma tradicional de ver las cosas a diferentes y enriquecedores puntos de vista que nos ayuden a ir mucho más lejos.
Ya no hacemos una maratón solos, sino apoyados en otras experiencias, de magníficas experiencias, que podemos seleccionar y adaptar para forjar esa “marca propia” con la que el alumnado va a identificarnos. Ya no se trata de una clase más a la que el alumno asiste por obligación sino un espacio, sea físico o virtual donde el docente disfruta con lo que hace y transmite esa positividad.
Por medio de ese espacio común de intercambio de emociones y experiencias puede lograrse esa formación “memorable” que nos distinga. Para poder transmitir esas emociones es preciso ese autoconvencimiento de luchar a diario por mejorar, recoger las experiencias y valorar tanto lo que ha funcionado, como aquello que precisa seguir siendo pulido.
Consejos para iniciar nuestra Propuesta Formativa
Preguntarnos quién va a recibir esa formación, qué es lo que precisará, para que puede precisar mejorar esas competencias y porqué precisa aprender con este u otro proceso puede ayudar a clarificar el camino a realizar. Si nos fijamos tras esta propuesta se encuentra la contestación a las clásicas preguntas del ¿Quién? ¿Qué? ¿Para qué? y ¿Por qué?
Desde este punto de partida podemos emplear el tamiz de esas preguntas para que nuestra observación permita detectar:
- Actividades que realizan hasta el momento y como ayudar a mejorar ese flujo de trabajo.
- Principales dificultades que podemos encontrarnos
- Valoración de los éxitos logrados al comprobar lo funcional que ha resultado ese aprendizaje.
- Cada una de esas fases debe constar de su propio seguimiento para lograr aprovechar el máximo jugo.
Objetivos
Basándonos en la observación deben ser alcanzables, con un objetivo general y los particulares que le acompañen. Si nuestra formación va a ser extensa cada módulo nos debería permitir la resolución de uno u varios objetivos. Redactando, preguntándonos y evaluando podremos mejorar nuestras líneas estratégicas.
Tiempo y Desarrollo
La distribución de los contenidos en el tiempo es clave. El peso. La profundidad y el desarrollo de cada bloque de contenido, de cada estructura de nuestra materia serán determinantes a la hora de realizar nuestra temporalización.
En la formación presencial hay que tener muy en cuenta las sesiones con una menor duración, contar con las pausas, tiempos asignados a tareas, etc…
En la formación online no se puede perder de vista la temporalización, la calendarización de todos esos aspectos en los que esperamos que el alumno vaya avanzando.
Algunas metodologías a emplear
Si no sabemos qué método puede ser el más adecuado formularnos preguntas sobre que puede facilitar el aprendizaje, tiempo de aplicación o nuestra experiencia aplicando el método pueden darnos las mejores respuestas.
Una cosa está clara y es tener en cuenta a los clásicos, es decir los métodos expositivo, demostrativo, interrogativo, por descubrimiento, activo-creativo…sin perder de vista a metodologías como:
Flipped Classroom (Aula Invertida)
El alumno estudia la materia en primer lugar y esta se trabaja en el aula. Gracias a este aprendizaje a través de su propia actividad y a una consolidación de los conceptos en el aula, sintiéndose protagonistas, los alumnos pueden lograr un aprendizaje más significativo.
El aprendizaje Basado en Proyectos
Los alumnos solucionan problemas de la vida real por medio de proyectos. Nuestra labor será la de pulir las estrategias que permitan sacar el máximo provecho.
Gamificación
Gracias a un ambiente lúdico el aprendizaje se produce de una forma más motivadora.
Incluir el juego en muchas de nuestras actividades, le llamemos dinámica o de otras mil formas puede permitirnos alcanzar nuevos y mejores objetivos. Eso sí, partiendo de una planificación 10, ya que el juego simplemente por el juego …podría tener resultados estériles.
Design Thinking
Este sistema que se basa en la innovación y en sacar todo el partido a la creatividad es una excelente herramienta para la resolución de problemas,
Espero haber conseguido poner un poco de luz… a nuestra noche….o mejor dicho, al día a día al que nos enfrentamos. Si asociamos nuestro impulso diario a nuestro espíritu creativo seguro que nos acercamos más a nuestras metas.
Por: Juan Enseñat
Ilustraciones: Juan Enseñat (Juanense)
Bibliografía
Formador 5.0. David Barrera. 2021. Editorial LID
Webgrafía:
https://www.realinfluencers.es/2017/03/02/8-metodologias-profesor-siglo-xxi-deberia-conocer/