La necesidad de que exista la evaluación de impacto ambiental
El desarrollo socioeconómico de la población ha generado problemas medioambientales que han requerido de sistemas de gestión ambiental para prevenir y gestionar los posibles riesgos derivados de las acciones antrópicas. Uno de los instrumentos preventivos empleados es la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA). Se trata de un proceso jurídico- administrativo cuyo objetivo es el de identificar, evaluar, predecir y corregir los efectos directos o indirectos que un proyecto pueda causar.
Estos efectos pueden darse sobre diferentes elementos como:
- El ser humano, la fauna y la flora.
- El agua, el suelo, el clima y el aire.
- El paisaje.
- El patrimonio cultural, la calidad de vida y los bienes materiales.
Objetivos de la evaluación de Impacto ambiental
Con el procedimiento de EIA se pretenden conseguir los siguientes objetivos:
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Incluir observaciones ambientales positivas y negativas en el proceso de evaluación.
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Prever, prevenir o minimizar los efectos negativos derivados de un proyecto.
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Asegurar la sostenibilidad del medio natural y de los procesos ecológicos.
A la hora de realizar una evaluación ambiental, debemos distinguir dos tipos de procedimientos: la EIA para evaluar las consecuencias ambientales de proyectos y la EAE para evaluar las derivadas de planes y programas.
La evaluación de impacto ambiental.
Hace referencia al procedimiento técnico- administrativo de análisis de un proyecto, obra u actividad concreta sobre el medio ambiente. Este procedimiento se divide en dos tipos:
- Evaluación ordinaria, para los proyectos del Anexo I de la Ley 21/2013. Los proyectos incluidos se clasifican en 9 grupos en función de los diferentes ámbitos de actividades, cada uno de los cuáles detalla las características concretas que deben cumplir los proyectos para requerir una EIA ordinaria. Finaliza con la declaración de impacto ambiental (DIA).
- Evaluación simplificada, para proyectos del Anexo II de la Ley 21/2013 y proyectos no incluidos en el Anexo I que puedan afectar a los espacios de la Red Natura 2000. El anexo incluye 10 grupos diferenciados de proyectos que requieren la EIA simplificada. Finaliza con el informe de impacto ambiental (IIA).
Pero, ¿habías oído hablar de la Red Natura 2000? Se trata de una red de áreas ecológicas protegidas creada por la Unión Europea, cuyo objetivo es hacer compatible la conservación de la biodiversidad con el progreso, el desarrollo y el bienestar, salvaguardando las especies y los hábitats europeos. Se compone de Zonas Especiales de Conservación (ZEC), Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
La evaluación ambiental estratégica.
La EAE es un procedimiento de evaluación ambiental que incorpora criterios de sostenibilidad respecto a la aprobación de planes y programas. El objetivo es tener en cuenta la variable medioambiental antes de que se autorice o apruebe la ejecución de un proyecto, es decir, cuando se está planificando el modelo de actuación sectorial o territorial sobre el que se gestionarán proyectos concretos. La EAE actúa en momentos decisivos antes de ejecutar los proyectos, por eso influye positivamente sobre el medio ambiente y el desarrollo sostenible.
Al igual que la EIA, la EAE dispone de dos procedimientos de evaluación ambiental:
- Evaluación ordinaria, para planes y programas en los que se prevén efectos ambientales significativos. Finaliza con la declaración ambiental estratégica (DAE).
- Evaluación simplificada, para el resto de planes y programas, en los que cada estado miembro analiza caso por caso para determinar si provocan o no efectos ambientales significativos. Además, se incluyen modificaciones menores de planes o programas que se sometieron a vía ordinaria. Finaliza con el informe ambiental estratégico (IAE).
Excepciones
Ahora que ya conoces que hay proyectos, planes y programas que se someten a la evaluación ambiental, te habrás preguntado si hay excepciones a este procedimiento. La respuesta es sí, existen dos supuestos en los que no es obligatorio realizar la evaluación ambiental:
- En el caso de la EIA, los proyectos que se realicen como consecuencia de una catástrofe o accidente grave. Si se realiza sobre un espacio natural protegido de la Red Natura 2000, será necesario elaborar un informe a posteriori.
- En la EAE, los planes y programas que no son objeto de evaluación son los diseñados únicamente para la defensa nacional o la protección civil en respuesta de una emergencia o los de tipo financiero o presupuestario.
Si quieres profundizar en este tema, el curso de Evaluación de impacto ambiental te permitirá adquirir conocimientos sobre el procedimiento y la metodología aplicable en el proceso de Evaluación Impacto Ambiental. A lo largo del curso aprenderás sobre la evolución y legislación aplicable, el estudio de impacto ambiental como núcleo central del procedimiento y cómo se elabora el inventario ambiental. Además, podrás conocer los tipos de impactos y las diferentes metodologías para evaluarlos.
